El éxodo cubano persiste en el deporte

La Habana….Un año después de haber ganado brillantemente el campeonato nacional de béisbol, los Industriales, el equipo más emblemático de la pelota cubana, finalizaron décimos entre 16 equipos.
Y no fue de extrañar: se habían quedado sin siete jugadores que desertaron, incluidos dos pitchers importantes como Armando Rivero y Joan Socarras, y el estelar antesalista Leugim Barroso.
A dos meses de los Juegos Panamericanos, las deserciones siguen siendo un azote para el deporte cubano, agravadas por una situación económica que impide dedicar a la actividad deportiva tantos recursos como en el pasado.
El béisbol, el deporte nacional, sufrió un nuevo golpe cuando la novena cubana cayó ante Taiwán en la final de un torneo internacional en Rotterdam, Holanda. Esa derrota prolongó una racha nefasta: Cuba, tres veces campeón olímpico y múltiple titular mundial, no gana un título grande en béisbol desde el 2005.
Se cree que en los últimos 20 años cientos de peloteros abandonaron la isla para probar suerte en las Ligas Mayores de Estados Unidos, incluido Yohennis Céspedes, quien rompió récord de jonrones en la pasada temporada en Cuba y ahora está en la República Dominicana.
Céspedes siguió los pasos de otros beisbolistas que se fueron del país en tiempos recientes, como Gerardo Concepción, Yunieski Maya, Kendry Morales, Yunel Escobar, Alexei Ramírez, Aroldis Chapman, Yuniesky Betancourt y Dayán Viciedo.
Todos en lo mismo
El béisbol no es el único deporte afectado. El voleibolista Roberlandy Simon, capitán del equipo subcampeón mundial en el 2010, renunció a la selección este año junto a otros dos jugadores, en medio de versiones de que podrían desertar. El vóleibol ya había soportado la deserción de seis jugadores de la selección en el 2001.
En la Copa de Oro de junio, el futbolista Yosniel Mesa escapó por una escalera de incendios en Carolina del Norte y se quedó en Estados Unidos. “Fue un poco difícil porque los entrenadores estaban en el lobby del hotel.
Llevaba un vaso en la mano porque si me veían podía decir que iba por hielo”, relató luego Mesa.
Bajando la cuesta
El deterioro del deporte cubano ha sido progresivo y visible. Después de quedar en quinto lugar en los Juegos Olímpicos de Barcelona en 1992, detrás de potencias como la Unión Soviética, Estados Unidos, Alemania y China, Cuba finalizó 28va en los juegos más recientes, los de Beijing, en el 2008.
Y muchos se preguntan si en los Panamericanos de Guadalajara, en octubre, logrará mantener su tradicional segundo lugar, detrás de Estados Unidos, ante el embate de Brasil, que en la última edición de la justa le pisó los talones, y de un México que le apuesta fuerte a los juegos por ser local.
“Nos hemos dormido en los laureles”, dijo Fidel Castro en una columna de opinión después de los juegos de Beijing. “Seamos honestos y reconozcámoslo todos.
Revisemos cada disciplina, c recurso humano y material que dedicamos al deporte”.
No obstante, la principal razón de la debacle seguramente son las deserciones, que debilitan no sólo el béisbol sino también otros deportes.

 

Related

deporte 4105039537006587071

Publicar un comentarioDefault Comments

emo-but-icon

Publicidad

Publicidad





LAS MÁS DESTACADAS

EL TIEMPO

item