Recluso secuestra empleada en Penitenciario Elías Piña, logran someterlo a obediencia

COMENDADOR, Elías Piña…..En la tarde de ayer, el Centro de Corrección de Internos se vivieron dos horas y media ayer de tensión y preocupación luego que un recluso a punta de un punzón, secuestrara a una empleada de la entidad, para exigir su traslado a otro recinto. Pablo Ramírez, condenado a 20 años por homicidio de los cuales ya cumplió 10, aprovecho que Raquel Rosario, penetrara al interior de la cárcel, la agarro por los hombres, le coloco el punzón en el cuelo, se encerró junto a ella en una de las celdas, amenazando constantemente con matarla. Autoridades judiciales, religiosas, militares, empleados y funcionarios del Centro de Corrección de Internos, trataron durante las dos horas y media de persuadir al recluso para que depusiera su actitud y preservara la vida de Raquel Rosario, encargada del área del Economato, pero sin resultado en principio. Fue necesario la presencia de religiosos y de comunicadores de aquí, quienes les prometieron además del traslado, que su integridad física seria garantizada, el recluso Pablo Ramírez decidió deponer su actitud y permitió la salida del recinto de la empleada del centro. La custodia del Centro de Corrección de Internos que funciona en esta ciudad desde hace varios años, esta bajo la responsabilidad de la Dirección General de Prisiones, quien tiene asignados para esos fines, miembros de la Policía Nacional entrenado para custodiar los mismos. En todos esos centros hay un reglamento de operación y funcionamiento aprobado tanto por las autoridades de la Dirección General de Prisiones como por los mismos internos, que entre otras clausuras esta el castigo corporal a quienes lo violen. Debido a lo antes expuesto, luego de que Pablo Ramírez fuese sometido a la obediencia, sus compañeros del recinto le propinaron una pela como castigo por la “acción indisciplinaría que cometió en contra de la encargada del Economato, Raquel Rosario. Pese a que le prometieron traslado a la cárcel del 15 de azua, para donde él quería, su petición le fue negada y Pablo Ramírez continúa en el Centro de Corrección de Internos de esta ciudad