Acuerdan fortalecer investigación científica

SANTO DOMINGO…..El Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales y Universidad Iberoamericana (UNIBE) acordaron este lunes ampliar su alianza estratégica en el manejo del Parque Ecológico Las Malvinas, enfatizando en la investigación ambiental y el desarrollo comunitario.

En ese sentido, elaborarán un Plan de Manejo que incluya investigaciones sobre la biodiversidad de la zona y actividades que impacten positivamente en los alrededores de la zona ubicada en las márgenes de los ríos Ozama e Isabela. Citaron acciones para mejorar la seguridad ciudadana, propiciar las actividades deportivas, educativas y comunitarias.

El ministro de Medio Ambiente y Recursos Naturales y el rector de UNIBE, doctores Bautista Rojas Gómez y Julio Amado Castaños, respectivamente, visitaron el lugar, donde destacaron el extraordinario valor ecológico por la biodiversidad existente. Estuvieron acompañados de autoridades de la cartera, de la academia, comunitarios y de estudiantes.

Rojas Gómez expresó su satisfacción por la labor que hasta el momento ha realizado UNIBE en el Parque Ecológico Las Malvinas, “especialmente en lo referente a la motivación y sensibilización de la comunidad en la protección de los humedales y los recursos acuíferos”.

“Las áreas protegidas existen para el disfrute de las personas, por lo que las comunidades deben constituirse en el actor principal de su manejo. Siempre debe existir la conexión entre los seres humanos y la naturaleza”, expresó.

Los Humedales del Ozama

El Parque Ecológico Las Malvinas y la islita La Esperanza se encuentran la confluencia de los ríos Ozama e Isabela, como parte del  Parque Nacional Humedales del Ozama. Este mide  47.42 kilómetros cuadrados, con un sendero de 27 kilómetros de largo que conecta la Laguna Manatí, en La Victoria, con el Cachón de la Rubia, en Santo Domingo Este.

Algunas de las lagunas, como la de Yuna, alcanzan entre 4 y 5 kilómetros de largo en tiempos de lluvia. El Cachón de San Isidro es uno de los arroyos más visitados.

Las autoridades del Ministerio de Medio Ambiente han logrado recuperar un  área que, aunque protegida, estaba deforestada, y actualmente sirve de enclave de recreación para las familias dominicanas y los visitantes extranjeros.

En la zona se exhibe la reforestación de más de 120,000 plantas, especialmente caoba, mara, roble, corazón de paloma, Juan primero, ceiba y capá. En algunos puntos se han construido infraestructuras mínimas para servicios sanitarios y una brigada del Servicio Nacional de Protección Ambiental se encarga de vigilar las zonas ya habilitadas para el uso público.

Estos lugares ya reciben cientos de visitantes de universidades, colegios, liceos, instituciones privadas y públicas, investigadores, personas relacionadas con el turismo y jóvenes estudiantes que realizan labores sociales y académicas de reforestación.