Autoridades ucranianas acordonan el Monasterio de las Cuevas y arrestan a su dirigente

Kiev, Ucrania-----La Policía ucraniana acordonó el Monasterio de las Cuevas de Kiev, una de las sedes eclesiásticas más antiguas y prestigiosas de Ucrania. Su dirigente fue puesto bajo arresto domiciliario bajo sospecha de cooperación con Rusia, informan medios locales. Desde la ONU instan a Kiev a terminar con la discriminación de la Iglesia ortodoxa ucraniana.

"Después de que el dirigente Pável fuera declarado sospechoso, la Policía acordonó su recinto en el monasterio. No se permite la entrada de fieles", indica el medio ucraniano Strana.ua en su canal de Telegram.

Poco antes, el abad del monasterio, el metropolitano Pável declaró que estaba bajo sospecha de las autoridades ucranianas y que su domicilio "está a punto de ser registrado". Asimismo detalló que le explicaron "en pocas palabras" que estaba acusado de "cooperación con Rusia e incitación interreligiosa".

"El metropolitano Pável está acusado de incitación a la discordia interreligiosa [artículo 161 del Código Penal]. Se trata de unas declaraciones en relación con la Iglesia ortodoxa de Ucrania y el Patriarcado de Constantinopla hechas por él en un mensaje de video llamado 'Pidiendo justicia para nuestra Iglesia'", informó el canal de Telegram de la Iglesia ortodoxa ucraniana.

Poco después, el dirigente religioso confirmó en una conversación con feligreses que lo "pusieron bajo arresto domiciliario".

El Servicio de Seguridad de Ucrania (SBU) ya comenzó los registros en la casa del metropolitano Pável, declararon a Sputnik testigos presenciales.

Desde el Patriarcado de Moscú declararon que es una prueba de la ilegalidad que vive Ucrania.

"Poner al metropolita Pável bajo arresto domiciliario por cargos falsos es una continuación lógica, por desgracia, de la ilegalidad que perpetran hoy las autoridades ucranianas. Así es su 'diálogo' con los representantes de la mayor confesión cristiana de Ucrania", escribió el portavoz del Patriarcado de Moscú, Vladímir Legoida en su canal de Telegram.

En el último año, el régimen de Kiev ha organizado la mayor oleada de persecución de la historia reciente del país contra la Iglesia ortodoxa ucraniana a la que se identifican millones de creyentes. Con el apoyo de las autoridades, ultranacionalistas y cismáticos han atacado a clérigos y creyentes. Realizan registros en iglesias y monasterios. Además, el Gobierno exigió que los monjes abandonen el Monasterio de las Cuevas de Kiev antes del 29 de marzo.

El patriarca Kiril de Moscú y toda Rusia calificó la persecución de la Iglesia ortodoxa ucraniana de burla del principio de los derechos humanos y las libertades, e instó a los líderes religiosos y a las personalidades internacionales a impedir el cierre del Monasterio de las Cuevas de Kiev.